Retirar CO₂ para fabricar combustibles sintéticos

Retirar CO₂ para fabricar combustibles sintéticos

La movilidad eléctrica es una de las tecnologías que está más desarrollada en el camino para reducir las emisiones del transporte. Pero no es la única: alternativas como los combustibles sintéticos (también llamados e-fuels), se presentan como una opción más que viable para descarbonizar este sector.

Qué son los combustibles sintéticos y qué ventajas tienen

La novedad de los carburantes sintéticos radica en que se utiliza CO₂ retirado de la atmósfera como materia prima para su fabricación, además de hidrógeno renovable obtenido al separarlo de la molécula del agua. «La misma cantidad de CO₂ que se recoge del aire se emplea en los vehículos. De esta forma, generamos un círculo de reutilización del CO₂ y no incorporamos nuevo dióxido de carbono a la atmósfera, por lo que no se contribuye al cambio climático», apunta Javier Aríztegui, gerente de Transición Energética y Movilidad en Repsol Technology Lab. El balance neto de emisiones de CO₂ es de cero.

Los e-fuels se pueden utilizar en motores de combustión como los que se instalan actualmente en los automóviles de todo el mundo, así como con las infraestructuras existentes de distribución y repostaje. ¿Por qué? Pues porque tienen «unas características químicas equivalentes a las de los combustibles que conocemos: las gasolinas, los gasóleos o los querosenos», afirma Aríztegui.

Puedes leer el artículo completo de La Razón a través de ESTE ENLACE.

ENTRADAS RECIENTES